La red neuronal es una compleja trama de conexiones, sometidas a la acción de neurotransmisores y neuromoduladores que las excitan o inhiben.
Las neuronas que recogen datos sensoriales descargan sus señales en los puntos de relevo (sinapsis) con un ruido variable. El proceso de transmisión incluye mecanismos de inhibición que permiten eliminar el ruido que emborrona la señal.
Igual sucede con las órdenes motoras a las neuronas que acaban contrayendo los músculos (motoneuronas del asta anterior de la médula). El flujo de señales descendentes activaría un exceso de unidades motoras, que sólo aportarían «ruido», quitarían precisión. Diversos mecanismos de inhibición, a través de interneuronas inhibidoras, retocan la orden, apagando aquellas unidades que sólo perturbarían la fineza del movimiento.
Inhibir es tan importante como activar. Sin embargo la función inhibidora de las neuronas ha recibido menos atención.
La inhibición permite separar el grano de la paja, gestionar la relevancia, el ajuste fino.
Los estados de alerta atribuyen relevancia en exceso a estímulos que, realmente, carecen de ella.
La inhibición se inhibe y el ruido aumenta. Todo se convierte en información. Los finos mecanismos de inhibición neuronal quedan apagados y la excitación campa a sus anchas.
El aprendizaje consiste en gestionar en tiempo y espacio la inhibición de circuitos excitados por el flujo continuo de estímulos y respuestas.
Las capas de procesamiento de alto nivel (lóbulo prefrontal) debieran inhibir las pulsiones de las capas inferiores, en los casos en los que no existe un estímulo que justifique su encendido.
En los estados de sensibilización central las capas de alto nivel de procesamiento excitan en vez de inhibir esas pulsiones, haciendo, por ejemplo, que la amígdala (un núcleo de respuestas reflejas a estímulos relevantes, aversivos y apetitivos) tome el mando y descargue cuando no debiera hacerlo.
Hay inhibición disponible a todos los niveles. Las áreas evaluativas imponen el modo inhibitorio razonable cuando corresponde o lo suprimen si predomina el estado de alerta.
La falta de racionalidad evaluativa impone el modo desinhibido del miedo.
Urge restaurar el equilibrio entre excitación e inhibición.
¡Inhibe y vencerás!
«Hay inhibición disponible a todos los niveles. Las áreas evaluativas imponen el modo inhibitorio razonable cuando corresponde o lo suprimen si predomina el estado de alerta.
La falta de racionalidad evaluativa impone el modo desinhibido del miedo.»
Hola Arturo
Asi pues:
Que inhibe la inhibicion?
El error evaluativo
Se aprende a inhibir o desinhibir racionalmente o con arreglo a verdadera amenaza?
Si… creo…
lo fomenta la cultura, los tutores… etc
Verdad?
Y se desaprende?
Creo que tambien…
Se suele imponer el modo conservador( inhibiendo la inhibicion)?
Activando la activacion?
Principio de cautela ante amenazas inscrito desde la prehistoria y acentuado por ciertas doctrinas de aprendizaje??
Escogemos otros tutores? Aun ya afectados por esta sensibilizacion snc?
Los fisioterapeutas, los pedagogos, los padres, los profes…etc?
Saludos afectuosos
J Serra
Pep: la inhibición resalta lo relevante sobre el ruido de fondo. En los estados de alerta, lógicamente aumenta la sospecha hacia todo y se bloquea la inhibición, en detrimento de la relación señal/ruido. La instrucción experta modula la inhibición, para bien o para mal. La experiencia utiliza la inhibición selectiva de lo irrelevante.
En resumen grosero
Hay complejos filtros en los inputs
Los hay tambien en los outputs
Aprender a ajustar correctamente / proporcionalmente dichos filtros
Se puede vamos…
Un abrazo