>Pinzamientos

> El cuerpo está lleno de nervios. Van y vienen de cada punto a la médula espinal. Su “camino” está marcado por huesos, fascias, ligamentos y músculos. Necesariamente deben atravesar articulaciones. Al andar, correr, saltar o vegetar en el sofá los comprimimos, doblamos, estiramos y torsionamos. No hay que preocuparse. El nervio está preparado para afrontar el estrés mecánico que todo ello supone. Es una estructura elástica, torsionada, forrada y almohadillada. De otro modo estaríamos en un ¡ay! continuo. Si nos pasamos de rosca en la compresión posicional, muchos nervios “protestan” y notamos hormigueo. Basta cambiar de posición y esperar …

Seguir leyendo