La red neuronal no es mas que química organizada biológicamente. Química con historia evolutiva, capaz de generar memoria-predicción; capaz de imaginar, aprender, detectar y corregir errores o de emperrarse en ellos, creando bucles que alejan de la realidad y someten al individuo a mortificación y disfunción.
La química de las neuronas construye una narrativa, una teoría de organismo que selecciona, entre muchas opciones (con las correspondientes consideraciones sobre costes y beneficios) una ganadora, no siempre la más ajustada a la realidad.
A veces, la red neuronal opera de un modo poco adaptativo y genera estados de alerta-protección injustificados. En la conciencia se expresan estos estados como «síntomas». El dolor es uno de ellos.