David del Rosario es un personaje atípico desde distintos ángulos de observación, lo cual ya lo hace interesante. De letras, ingeniero de telecomunicaciones, interesado en la Neurociencia, investigador… todo ello al servicio del ciudadano, de su día a día.
Para conocerse a uno mismo, no viene mal conocer el cerebro, el humano, el que gestiona nuestra peripecia vital desde su sistema de valores biológicos, evolutivos.
En busca del sentido de la vida
El cerebro, dice David y dice bien, no busca la veracidad, sino la coherencia. ¿Con qué? No lo sabemos. Cada cerebro (u organismo, si se prefiere) construye una idea de la interacción del organismo con el entorno e incita al individuo a golpe de sentimientos, razones, emociones y proposiciones más o menos honestas o deshonestas, a que se conduzca de modo coherente con lo que propone.
No siempre la propuesta cerebral agrada al individuo y este puede empeñarse en imponer su propio criterio, dejando de lado todo lo que recibe en la conciencia y empeñándose en vivir “a su manera”, de espaldas a lo que el cerebro “opine”.
Escuche al organismo: Neurociencia aplicada al día a día
David sugiere que debemos escuchar lo que el organismo nos propone, asumir que el cerebro tiene sus dinámicas, su sistema de creencias, sus valores y que el conocerlas nos puede ayudar a vivir el día a día con más plenitud y libertad.
Gracias a la iniciativa de mi hija Inés y a la generosidad de David, nos concedimos la oportunidad de charlar durante una hora y media e intercambiar opiniones sobre lo que cada uno piensa, se emociona y propone. No voy a entrar en el contenido del podcast. Les sugiero que lo escuchen. Es la primera vez que puedo charlar abiertamente con un neurocientífico y contrastar sin problema lo que cada uno da por cierto o incierto.
David ha escrito dos libros: El libro que tu cerebro no quiere leer y (con Sergi Torres) Biología del presente. Organiza cursos en los que explica cuestiones de Neurociencia a sus alumnos para que las apliquen a la gestión del día a día (Neurociencia aplicada al día a día).
No estaría mal que en las escuelas hubiera una asignatura: “Educación en Neurociencia para la ciudadanía”, aplicable a distintos ámbitos. David lo hace al ámbito del día a día del ciudadano y en GoiGroup lo hacemos en el ámbito de la pérdida de percepción de salud, un ámbito en el que la cultura experta la ha expropiado, sin que se dé una condición patológica que lo justifique.
Cuando los síntomas sin explicación médica mortifican e invalidan al individuo, es el momento de informarle sobre su cerebro, su sistema neuroinmune, su papel en la gestión de la libertad para explorar el mundo, la dependencia de la información de los expertos. Es el momento de recuperar la percepción de salud expropiada.
Espero que disfruten con la charleta y algo se mueva, si debe moverse.
Know pain, no pain.
La charla ha estado bien aunque ha quedado claro que cada uno desde su ámbito. Tú tienes un arduo trabajo en este campo ya que el dolor está muy demandado y con muchos déficits, errores y daños colaterales cuando se le ponen paliativos (efectos secundarios de las medicaciones, empatía, etc). Salu2 y cuídate.