Ansiedad anticipatoria
Existen amenazas potenciales, internas y externas. No hace falta que sean reales, basta que sean evaluadas como tales amenazas. Lo teóricamente posible, aunque sea altamente improbable, puede activar recursos de protección. Caemos fácilmente en la estructura de las fobias. El organismo aprende a evaluar amenazas, sin ninguna garantía de que sus evaluaciones sean razonables, sensatas. Ante una evaluación de amenaza se preparan los recursos que protegerían los tejidos de una amenaza consumada. El cerebro no es sólo reactivo a lo imprevisto. También responde a lo que teme que suceda. Es proactivo. En una crisis de migraña, se activan recursos defensivos …