Si padeces dolor u otros síntomas podemos ayudarte en GoiGroup, la nueva plataforma que hemos creado con Arturo Goicoechea dedicada a pacientes y profesionales.


La debilidad de la mente

La mente, es decir el cerebro, gestiona junto con el sistema inmune los recursos defensivos del organismo. Activa y desactiva programas cuyo objetivo es minimizar la incertidumbre de daño.

La mente no nace. Se hace. No es inteligente per se sino en función de la calidad del proceso de aprendizaje que irremediablemente acometerá desde el nacimiento hasta la muerte.

La mente es débil: ignorante, incauta, influenciable, temerosa, desconfiada.

La mente está socializada. Su conectividad está poderosamente influida por la imitación y los dictados de instructores expertos.

Dicen que la mente tiene poderes que no aprovechamos.

Podríamos curar enfermedades si fuéramos capaces de activar el poder curativo oculto.

Podríamos curar la migraña, la fibromialgia, el colon irritable, el síndrome de fatiga crónica, la lumbalgia crónica…

– ¿También el cáncer, la tuberculosis, la anemia perniciosa, el hipotiroidismo..?

– No. Son enfermedades. La mente no puede curar enfermedades. Se limita a gestionar recursos defensivos: a activarlos y desactivarlos.

– He leído que con el efecto placebo se pueden curar enfermedades. Podemos engañar al cerebro haciéndole creer que hemos dado un tratamiento para una enfermedad sin dar nada y el cerebro, la mente, con sus poderes dormidos y ocultos, puede curarla.

– No es cierto. El efecto placebo no modifica la enfermedad sino el modo como el cerebro la gestiona. Podemos engañar al cerebro de un paciente con dolor intenso por infarto de miocardio agudo. El cerebro modifica su estado de alerta tras la administración de un placebo (suero salino); el dolor amaina, el paciente se siente mejor… pero el infarto sigue igual.

El efecto placebo no desvela el poder de la mente sino su debilidad: su dependencia de las expectativas y creencias.

El cerebro, la mente, puede equivocarse. La cuota de error puede aumentar si su escolarización al calor de la cultura (imitación e instrucción) potencia ese error.

Los neurólogos constituyen el colectivo humano con mayor incidencia de migraña. Tienen una mente teóricamente poderosa pues disponen de la mejor información para controlarla pero sucede justo lo contrario: su mente les hace vulnerables.

La mente no es mas que un conjunto de expectativas y creencias. Ahí reside su poder. Lo que cree y espera guía la gestión de los programas.

Los neurólogos creen que la migraña es una enfermedad cerebral genética, misteriosa e irreversible. Retroalimentan con su convicción la activación de los programas de dolor, intolerancia sensorial y digestiva que definen una crisis migrañosa. La migraña no es una enfermedad sino un despropósito de la mente.

La mente migrañosa mete en el mismo saco lo relevante y lo irrelevante, lo patógeno y lo inofensivo, y activa los mismos programas cuando el padeciente se ha “extralimitado” con un poco de vino que cuando un meningococo ha burlado las barreras defensivas y ha colonizado las meninges.

La debilidad de la mente es necesaria para la socialización del individuo, para su pertenencia a cualquiera de los múltiples rebaños ofrecidos por la cultura.

La debilidad mental nos obliga a adquirir conocimiento, aprender, pero nos hace dependientes de lo que damos por conocimiento válido: de lo que se cree se cría.

La debilidad mental hace que padezcamos programas defensivos en ausencia de daño y que esos programas innecesariamente activados se apaguen con un fármaco, unas agujas, unas bolitas homeopáticas o con hierbas.

La alostasis es la propiedad biológica que permite a un organismo gestionar recursos extra frente a situaciones de estrés, físico o psicológico.

La migraña, la fibromialgia, el colon irritable… son estados alostáticos en los que se despilfarran recursos sin justificación.

La carne es débil. También la mente. La tentación de activar recursos defensivos desde el miedo al daño es poderosa.

Cuide su cuerpo. Cuide su mente. Cuide la información.

Cuide su información. Las ideas son liposolubles y se fijan a la grasilla cerebral haciéndose con el mando

Corpus sanum in mente sana.


Este blog es solo la punta del iceberg, se puede hacer mucho más.

En GoiGroup (el equipo de Arturo Goicoechea) enviamos consejos de lunes a viernes para desactivar los síntomas desde la raíz.

Además, al seguirnos recibes un audio de 10 minutos que para muchos de nuestros pacientes supuso un gran alivio.

Si esto te interesa, nos sigues aquí abajo con un click. Si cambias de opinión, dejas de seguirnos con otro click. Así de fácil:

Información Básica sobre Protección de Datos (GoiGroup)

Responsable: GOIGROUP SC. Finalidad: enviarte newsletter informativa con contenidos relacionados con la salud y promociones comerciales personalizadas automáticas. Derechos: Podrás ejercer tus derechos de acceso, rectificación, limitación y suprimir los datos, así como el derecho a presentar una reclamación ante una autoridad de control. Información adicional: En la Política de Privacidad de Goigroup.org


5 comentarios en «La debilidad de la mente»

  1. Martinez: gracias por la referencia. La propuesta me parece lógica. Quizás estaría bien prescindir del término “Encefalitis” miálgica pues no hay ninguna evidencia de inflamación encefálica. Estoy de acuerdo en el concepto de intolerancia sistémica al esfuerzo pero habría que matizar el concepto de enfermedad, los mecanismos que la generan.

  2. Hola Arturo
    Me gustaria saber como va el grupo de fibromialgia que empezo el proyecto con los medicos de Osakidetza.Teneis algun dato al respecto?Ya se que con las migrañas ha sido muy fructifero pero con fibromialgia?
    Siento no poner las tildes pero no lo consigo con el movil y soy consciente de lo feo que hace.
    Un saludo

  3. Sigue adelante la intervención con la pedagogía en grupos con buena aceptación de pacientes y profesionales. No tengo datos concretos. Se presentarán cuando haya suficiente número de pacientes pero por las noticias que tengo la respuesta es buena. Menos brillante que con la migraña pero satisfactoria, con algunos casos libres absolutamente de síntomas.

Los comentarios están cerrados.