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Grupos de dolor lumbar (XIII). El sistema de recompensa.

Hay una compleja arquitectura de centros y vías neuronales cuyo objetivo es promover aquella conducta del individuo que se considera conveniente desde la perspectiva de los intereses del organismo, como entidad física que debe sobrevivir y como individuo integrado en una sociedad que, también debe sobrevivir como sujeto estimado y amparado.

Ese conjunto de centros y vías que pro-mueve los hilos (músculos) de la marioneta del individuo se denomina sistema de aversión-recompensa y su modo de actuar es a través de la proyección a la conciencia del individuo de una serie de sentimientos que tienen la propiedad de incitarle a una determinada acción.

El sistema de recompensa proyecta sentimiento de hambre cuando requiere que el individuo busque comida, sentimiento de sed cuando quiere líquidos, picor cuando preferiría un buen rascado y dolor cuando sugiere o exige un acción defensiva.

El sistema de recompensa quita y pone ganas y desganas. El dolor quita ganas de moverse y pone las de quedarse quieto si la evaluación de amenaza se refiere a algo interno pero anima a la huida si la amenaza es externa (fuego, un león).

El objetivo de los sentimientos de hambre, sed y dolor es el de minimizar la incertidumbre de daño, la posibilidad de desnutrición, deshidratación o lesión.

Los sentimientos aversivos, de valencia negativa, permanecen activos en tanto el sistema no retire la conveniencia de proyectarlos. A veces son fugaces: un pinchazo de dolor, una sensación de sequedad en la boca, un “vacío en el estómago”, un picorcillo en la espalda… El individuo se da por enterado y sigue a lo suyo. Otras van en aumento y exigen la acción requerida. Los sentimientos cada vez son más intensos y apremiantes haciéndose insoportables y “dolorosos”.

El dolor puede exigir, a veces, la quietud y otras, lo contrario, la inquietud:

– Necesito mover las piernas o, incluso, levantarme de la cama y caminar. Es un dolor insoportable.

– Tiene usted un “síndrome de las piernas inquietas”…

La recompensa del dolor es su alivio. Sólo si se ejecuta la acción solicitada, aquella que figure en los sistemas de memoria como necesaria, cede el apretón. El ritual motor exigido es variopinto. Cualquier acto vale si está codificado como satisfactorio en el sistema.

Las ganas y desganas proyectadas por el sistema de recompensa se construyen por aprendizaje y contexto. Los motivos cerebrales no los conocemos mas que en términos generales. Cada individuo estará movido (motivado) por claves distintas y a cada uno se nos exigirá una acción diferente.

– Me va bien el yoga.

– A mí el ibuprofeno

– ¿Has probado la homeopatía?

– A MI las agujas no me hacen nada…

El individuo se motiva por el resultado de sus acciones “terapéuticas”. Es bueno aquello que suaviza el dolor. Si la quietud alivia es que la columna no está para cargas ni meneos y lo sensato es minimizar el movimiento o hacerlo con miedo al daño.

La motivación importante no es la del individuo sino la de su cerebro. La del individuo es siempre lógica, razonable: si haciendo o dejando de hacer esto o lo otro me duele menos haré eso o lo otro… La del cerebro a veces es razonable (apártate de las llamas) y otras está inmersa en una irracionalidad creciente, compulsiva (no te muevas pues se va a pinzar el nervio, rozar las articulaciones…).

Poco se habla de la entraña del sistema de recompensa, su profunda raíz biológica, evolutiva… y, sobre todo, del peligro que contiene en la sociedad actual.

En los grupos de dolor hablamos del sistema de recompensa. Creemos que es un tema clave. No es fácil trasladar las ideas. La motivaciones del individuo ocultan las cerebrales.

– A MI… YO…

Deshacer motivaciones irracionales cerebrales puede resultar complicado pero es fundamental.

Es imposible si el individuo complementa con sus miedos los de su sistema de recompensa y accede cándida y peligrosamente a sus requerimientos.

El cerebro y la marioneta del YO…

 


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7 comentarios en «Grupos de dolor lumbar (XIII). El sistema de recompensa.»

  1. El yo deja de ser marioneta en cuanto empieza a saber algo de cómo se las gasta el cerebro. El tema de los mecanismos de recompensa es fundamental para el cambio dentro y fuera del contexto del dolor. Pero sí que noto que los padecientes me miran con escepticismo cuando toco el tema.

  2. Mar: comparto tu valoración de la importancia de conocer los hilos motivacionales que mueven al individuo con la apariencia de voluntad libre y soberana del YO. Es una cuestión crucial para desmedicalizarse y despsicologizarse…

  3. Estoy diagnosticada de neuropatia del pudendo. Llevo medicalizada mas de un año. Ahora en junio ademas de la medicacion oral en la unidad del dolor me dieron recetas de parches de lidocaina y pomada de capsaicina. Las he comprado pero aun no he dado el paso, pues me resisto a entrar en esa espiral, de la q estoy casi convencida q no saldria. Lo tengo para evitar volver a urgencias como me paso en mayo, q tuve q acudir por q no podía orinar. Segun me dijeron mal control del dolor pelvico y bloqueo de esa zona, me lo impedía. Me cuesta medicarme soy tendente a tomar por debajo, pero el caso es q intento bajar las dosis a ver si yo lo puedo llegar a controlar y de momento no lo puedo conseguir.

    Tengo conseguir hacerme con el tema de recompensas, del q se habla en este articulo, pero realmente no se como.

    De momento hace cuatro dias no podia andar ni 50 metros, mi marido me dijo, pues subimos a casa y volvemos a bajar en un rato. Yo dije me niego, se me ocurrio, me siento en un banco en una postura un tanto klogica pero q a mi me relajaba la zona al no apoyarla, al rato pude caminar otros 50 m, al dia siguiente un poquito mas y asi llevo unos dias q he llegado casi a los 500 m.
    Bueno quiza esto q cuento sea irrelevante, o no tenga nada q ver con este articulo, pero seguire adelante a ver q logro
    Un saludo,

  4. Cristina: la neuropatía del pudendo es una etiqueta diagnóstica confusa, en ausencia de una lesión demostrable que afecta a ese nervio. Entraría, por tanto, en el cajón de sastre de los estados de dolor en una zona corporal en la que no hay causa evidente. En este voluminoso grupo es fundamental conocer el proceso de generación de dolor por parte del cerebro para saber qué conductas seguir (fármacos, actividad…). El objetivo es el de arrancar actividad proyectando la seguridad de que moverse, sentarse, estar de pie o saltar no hace daño sino que contribuye a mantener la normalidad y funcionalidad de los tejidos. El dolor no siempre es un buen indicador de lo que debemos hacer o evitar. A veces nos lleva por la dirección contraria a la deseable, es decir, tendríamos que hacer aquello que el dolor parece indicarnos que debemos evitar.

    Me parece fenomenal que hayas estirado la cuerda de los 50 a los 500 metros. Está muy bien pero debes asociar la convicción de que en la pelvis no hay nada que justifique estar quieta y que todo o gran parte es una valoración errónea de amenaza por parte del cerebro.

    Saludos

  5. Cristina: por si te ayudan a entender qué es el sistema de recompensa y te dan pistas, te pongo unos cuantos enlaces a otras entradas del blog:

    http://arturogoicoechea.wordpress.com/2012/01/21/sistema-de-aversion-recompensa-2/
    http://arturogoicoechea.wordpress.com/2011/02/25/la-decision-de-doler/
    https://arturogoicoechea.wordpress.com/2009/07/02/premios-y-castigos/
    http://arturogoicoechea.wordpress.com/2009/12/15/al-final-tuve-que-tomar/
    https://arturogoicoechea.wordpress.com/2011/05/06/la-toma-de-la-pastilla/
    https://arturogoicoechea.wordpress.com/2010/02/28/%C2%BFdonde-esta-el-truco/

    Te recomiendo empezar a leer el blog por el principio, allá por el año 2009… Es fundamental saber qué está ocurriendo, lo que te dice Arturo, conocer el proceso de generación del dolor, y para ello, se necesita la información, y en el blog la puedes encontrar. También hay profesionales que te pueden guiar, fisioterapeutas-pedagogos con una formación específica para trabajar con personas con dolor crónico (en la línea que se plantea desde este blog), que explican la fisiología del dolor y ayudan a detectar y evitar programas motores defensivos y no funcionales, y también a perder el miedo al movimiento y las acciones cotidianas. Si te interesa ayuda en este sentido y vives cerca de Vitoria, te pongo un enlace:

    http://www.asiermerino.com/tratamiento_7.php

    Si no vives cerca, te derivo a la web de la SEFID (Sociedad Española de Fisioterapia y Dolor) para que te orienten allí.

    http://sites.google.com/site/sefidsp/

    Un saludo.

  6. Gracias por la ayuda. Voy a empezar por el principio leyendo todo lo que en dichos enlaces conste.

    Y, si, vivo en Vitoria por tanto tomo nota de las direcciones, nuevamente Gracias a todos.

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